El niño Jossef
José Luis Sebastián Salas
Se acercó, resuelto y
pidió amablemente a la dama -que hablaba y gestionaba risitas entre sus amigas
– que le permitiera bailar con él la última pieza que sonaba en el salón de baile.
La mujer levanto levemente sus ojos rasgados, parpadeó y frunció levemente el
ceño levitando la mirada. Observó a un hombre fornido, de tez blanca cara de
rasgos cuadrados, ojos saltones ligeramente de color verdes, que se había
inclinado cortésmente ante ella. Dudó por un momento, las amigas se quedaron en
silencio, como premeditando el futuro. Se levanto en medio de ellas, tomo la
mano del caballero y los dos se dirigieron al centro del salón. La pareja
arropada por los demás bailarines, empezó a moverse lentamente dibujando
semicírculos al son del vals que imbuía el ambiente.
Terminada la melodía,
se quedaron parados. ¿La joven preguntó __ Quién sois caballero? Es la primera
que lo veo. El varón con aire de solemnidad respondió __ Mi nombre es José y
apellido Santa Cruz y Villavicencio. Era alto, el uniforme del Ejercito
realista marcaba sus espaldas y brillaba una pechera, adornada por estrellas y
galardones puntiformes. -__ MIS padres son españoles, de Castilla y León, pero
yo nací en Huamanga, en el Perú y pertenezco a la orden de Santiago. A
la joven le parecía cada vez más alto y portentoso con cada palabra que brotaba
de sus labios carnosos y protruidos, aquel desconocido que se le presentaba.
Y usted
distinguida dama, permítame conocer su nombre si es tan gentil __mi nombre es
Juana Basilia Cala humana, nací en Harina __ tal vez Ud. conozca el poblado,
cerca en el Lago Titicaca, en la actualidad regento el cacicazgo de la localidad.
Era de rasgos indígenas, tez marronácea, amplios pómulos achicaban sus ojos al
medrados que brillaban entornados por sus cejas pobladas, la nariz recta y
labios lineales, que asistían armoniosamente la cara, con la belleza que da la juventud.
__Mi familia proviene de los incas, fíjese Ud. de lo cual estoy muy orgullosa y
feliz __ Su atuendo denotaban clase alta, faldones finamente bordados,
chaquetilla azul con botones dorados, cubrían su torso y elevaban su presencia.
José ofreció
su brazo y Juana acomodo el suyo con el del señor, se acompañaron, se
dispusieron a sentarse, en un balcón amplio que ofrecía los astros y la luna
acompañados por la cálida noche. __ Estoy maravillado por su belleza __
balbuceo José. __ no me haga sonrojar ___ respondió ella bajando la mirada. __Quisiera
conocerla y si usted me permite cortejarla. Pese a nuestros orígenes, tenemos
mucho en común, lo presiento.
Los
ejércitos españoles , dominaban toda la región , 1770 y José , quien ostentaba
el titulo de “Maestro de campo” , había acuñado
una riqueza suficiente para emprender un futuro prometedor .Tenia 34 años , y aquella muchacha indígena caló hondo
en su pensamiento y en su corazón joven .Por su parte Juana , quedo embelesada
con el galán y dio rienda suelta a su
libertad de mujer de clase alta , con lo que los dos se unieron en matrimonio ,
bendecido por el Prior Antonio Camacho cura católico español , y además por un
ritual incaico con inmersión en las aguas del Lago Titicaca incluido.
La pareja se
constituyó en La Paz, ligados al trabajo de José, No faltaron exclamaciones de
señoras de abolengo y demás, que criticaban la unión entre un criollo y una
indígena. No faltaron las risotadas en banquetes de gente mal habida cuando el
matrimonio de Jose y Juana ingresaban en un evento.
Juana
Basilia luego de 9 meses de llevar consigo al fruto del amor por José, se
desembarazo en Huarina, su tierra natal , trayendo a un niño de rasgos mestizos
, que lloraba intensamente al ver la luz . Era la mezcla de las razas, era un
símbolo de unión entre dos culturas, era un valiente recién nacido, que luchaba
por vivir, como lo hiciera luego por la libertad de América. Era Josef Andrés
de Santa Cruz y Cala humana. A la postre, Gran Mariscal de Zepita
joseconacentoenlao
NOTA AL PIE ;
Relato de el encuentro de los padres de Andrés de Santa Cruz
jlss