SABOREANDO LA VIDA

 NOTA AL PIE : 

Un relatito acorde con la evocación de la vida por los olores gastronómicos

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SABOREANDO LA VIDA

Jóse Luis Sebastián S.

 

La brisa marina surcaba la playa, haciendo mecer las olas mediterráneas. Me acerco al chiringuito. Hablo con Rogelio un entrañable amigo cocinero español.

-Esto es el paraíso- inicio la conversación. Soñé con en este momento muchas veces, allá en Bolivia. Estamos sentados frente al mar observando el panorama infinito. El océano azulino y la playa marronacea .

-Qué bueno que te sientas cómodo –me replicó Rogelio. -Los placeres de la vida se los siente mejor en buena compañía y los momentos hacen la felicidad-reflexiono. Se levantó  y dirigiéndose hacia la pequeña cocina que se encontraba oculta dentro de un cobertizo semi cubierto , pero ventilado por el aire de la playa, empezó con el ritual de la cocción de los alimentos .

El fogón que se presentaba frente a el hacía chirriar la sarten encimera. Partículas de olor se desprendieron de la misma , llegando a estimular nuestras  partículas gustativas.

 

 

 El sabor dulzón de los pimientos rojos y verdes, la cebolla y el tomate fritos salpicaban en la sarten , embadurnados con ajo y sal . Las vainitas ofrecían su color verde al espectáculo. Corazones de las alcachofas hervían ofreciendo su ternura . Brotaban las hojas de Laurel entremedio del arroz frito y jugoso. Coronando todo se observaban langostinos descascarados y camarones con su coraza rojiza y por su puesto lonjas delgadas de chorizo español.

Descorché una botella de vino riojano, de la tierra de mi padre .Serví dos copas transparentes , llenándolas del tinte rojo oscuro que  ofrecían sus tanitos al ambiente.  Toda la atmosfera en la que me encontraba, me  introducía en mis raíces. Me devolvía a mi edad infantil. Apareció la imagen de mi madre cocinando en mi casa, ataviada con un mandil blanco y una pañoleta que cubría su cabeza, mientras silbaba una tonada aprendida en España. “¿ Como puedo volar atreves del tiempo mediante sensaciones olfativas? “ – pensé- . Eso no importa .La sensación es lo que marca este momento.

-A la mesa – el grito de Rogelio, me hizo espabilar de mis meditaciones y volver a la realidad.

Cada vez que pasa esta secuencia por mi cabeza, estimulada por una comida ,trato de entender el origen del estímulo del apetito  . Hoy no lo hare, solo dejare que mis sentidos disfruten de los sabores, olores y amistad que me ofrece la vida.

joseconacentoenlao